Centenares de personas han salido este sábado a las calles de la ciudad estadounidense de Baltimore en el estado de Maryland (noreste) para mostrar su indignación por la muerte de otro afroamericano a manos de policías blancos.

Los indignados recorrieron las calles de la ciudad hasta la estación de Policía, donde llegó hace dos semanas el joven negro, Freddie Gray, con una columna rota por la golpiza policial durante su detención. La herida le causó la muerte el pasado domingo, una semana después de su arresto ocurrido el 12 de abril.

Los manifestantes han portado pancartas en los que se pedían “Cerrar la ciudad”, “Justicia para Freddie Gray” y se leía entre otros lemas, la famosa frase “La vida de los negros importa” y “Terminen el terror policial ya”.

Han gritado, asimismo, consignas como “Sin justicia no hay paz” y otras en contra de la discriminación racial y la escalada de la brutalidad policial en EE.UU..

La protesta tiene lugar un día después de que la Policía de Baltimore reconociera que los agentes cometieron por lo menos dos errores de procedimiento en el arresto de Gray el pasado 12 de abril, en el que éste resultó herido gravemente.

La Policía, por su parte, admitió que Gray no recibió asistencia médica pese a que lo solicitó.

"La policía tiene una tradición de deshumanizar, golpear y mostrar a la gente quien está a cargo", ha lamentado el pastor Graylan Hagler durante su alocución en el acto.

A este respecto, ha exigido a la nación levantarse para evitar que la policía siga “faltando el respecto a nuestra comunidad”. “Freddie Gray es uno de tantas” víctimas de la brutalidad policial, ha adelantado.

El video del incidente grabado por un testigo en su celular muestra como los policías trasladan a Gray a la furgoneta policial, mientras sufría una herida grave en la espina dorsal, que obligó a hospitalizarlo y lo dejó en estado de coma hasta su fallecimiento.

La muerte de Gray se produce en un momento de gran tensión en EE.UU. entre los distintos cuerpos de policía y la comunidad, después de que durante los últimos meses hayan tenido lugar varios casos de abuso policial con resultados mortales.

Este asesinato se suma a los últimos incidentes similares en los que agentes blancos matan a tiros a ciudadanos afroamericanos desarmados, hechos que han provocado multitudinarias marchas antirracistas en la mayoría de las ciudades estadounidenses, y Baltimore se ha convertido en el último escenario de manifestaciones por esta cuestión.