Con la entrada en vigor a partir de este lunes de un alto el fuego unilateral e indefinido, el grupo guerrillero las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pone fin a las “operaciones ofensivas” en Colombia.

"Comunicamos a todos nuestros Bloques, Frentes, Columnas, Compañías y demás estructuras político militares, al igual que a las milicias bolivarianas y populares y estructuras subordinadas, que a partir de las 00.00 horas del 20 de julio rige la orden de cesar toda acción de carácter ofensivo contra las fuerzas armadas del Estado y la infraestructura pública y privada", señaló la guerrilla en un comunicado del Secretariado firmado en La Habana, la capital cubana, informa la agencia Europa Press.

Este alto el fuego "constituye un serio compromiso de nuestra organización", reza el comunicado de las FARC.

El compromiso "práctico, de carácter humanitario" intenta facilitar un acuerdo con las autoridades de Colombia sobre "fórmulas efectivas de desescalamiento del conflicto". Según la guerrilla, el conflicto "hace daño a los propósitos de paz y reconciliación".

No obstante, según la guerrilla "ninguna unidad está obligada a dejarse golpear por fuerzas enemigas y tendrá todo el derecho al ejercicio de su legítima defensa en caso de ataque".